El fútbol como forma de vida

Historias del Calcio es un libro en el que Enric González realiza una crónica de Italia a través del fútbol. La narración transcurre en las distintas ciudades del país de la bota. Estas historias de tan apenas tres páginas fueron publicadas en el diario El País entre los años 2003 y 2007. El conjunto de todas ellas forma la crónica desordenada de una sociedad en la que el fútbol es uno de los pilares fundamentales de su forma de vida.

Algunos de los futbolistas más conocidos de la actualidad son los protagonistas de las historias. Al leer este libro descubrirás las cosas más curiosas de jugadores como: Adriano, Totti, Del Piero, Vieri, Materazzi o Cassano entre otros muchos. Pero no solo los protagonistas del césped aparecen en este libro, otros como Capello, Berlusconi, Moggi o el archiconocido arbitro Pierluigi Colina también son personajes protagonistas en muchos de los relatos. Enric González también deja espacio para la nostalgia, recordando a mitos que han pasado por Italia. Maradona, Gianni Rivera, Paolo Rossi o Dino Zoff aparecen para recordar el fútbol de antaño y que así los más veteranos puedan entonar mientras leen estas historias, la tan recurrente frase: “Cualquier tiempo pasado fue mejor”.

Enric González es periodista y ha trabajado como corresponsal en Londres, París, Nueva York, Washington y Roma. La gran cantidad de sitios donde ha vivido y todos sus viajes le permiten casi en cada historia hacer comparaciones, silogismos y poder contar anécdotas que se puedan relacionar con el protagonista de su historia. Este libro no es solo para amantes del fútbol, desde luego que ellos serán los más agradecidos, pero no los únicos. La política, la violencia de hinchas y policías, sumados a las divertidas anécdotas, las tradiciones italianas e incluso el conocimiento de datos escabrosos que hasta ahora eran desconocidos en España conforman este libro.

Este repaso a las últimas temporadas del Calcio no tiene desperdicio y tiene el punto positivo que las historias tienen identidad propia, a pesar de tener un orden cronológico no es necesario leer las historias tal como aparecen, lo importante es lo que cuenta cada una de ellas.